Ante el riesgo que representaba una planta de tratamiento de aguas residuales abandonada por la empresa inmobiliaria “Profusa” en Lomas de Cuautitlán, el Gobierno Municipal de Cuautitlán Izcalli, a través de Operagua, ha comenzado el desfogue del agua acumulada en la instalación.
El alcalde Daniel Serrano, preocupado por los reportes de la comunidad sobre el estancamiento del agua y la trágica pérdida de animales, instruyó a Christian Laguna, director general de Operagua, a revisar la situación de la planta. En su conferencia de prensa del 10 de febrero, el alcalde anunció que se planea intervenir el sitio, cercarlo y utilizar un vactor para vaciar el agua acumulada.
Este martes, el personal de Operagua inició las labores de drenaje, un proceso que se espera tome varios días debido al gran volumen de agua. Además, se contempla la construcción de una derivación hacia el drenaje cercano para prevenir futuras acumulaciones.
El organismo también está evaluando la reposición de la valla perimetral, que fue robada debido a la falta de vigilancia en la instalación. Según el director de Operagua, la planta fue abandonada porque ni el organismo ni el Gobierno Municipal recibieron formalmente la infraestructura, lo que ha llevado a su deterioro y a convertirse en un foco de acumulación de aguas pluviales y residuales en la zona.
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